Santo Cristo de la Vera+Cruz

El Santo Cristo de la Vera+Cruz es el principal Titular de nuestra Corporación. Unido intrínsecamente al origen de la misma, estamos ante la Imagen de penitencia más antigua de todas las que procesionan en nuestra Semana Santa, así como ante una de las obras de más valor histórico-artístico de Dos Hermanas.

Se trata de una obra anónima realizada siguiendo la técnica del papelón que procede, según la tradición, de la zona de Michoacán (México), fechada hacia la mitad del siglo XVI. El tronco y los miembros presentan un notorio arcaísmo frente a la cabeza, que se encuentra mucho más trabajada. Durante mucho tiempo se le cubría con un sudario de tela y se le tocaba con cabellera de pelo natural.

No siempre fue este Crucificado el que realizaba Estación de Penitencia. En los primeros años de la Cofradía hacía lo propio un crucifijo portado por uno de los cofrades con mejor reputación. En 1931 se bendice y procesiona otro Crucificado realizado por el sevillano Miguel González Migolla debido al fuerte aguacero que cayó sobre nuestro Titular y que se sumaba a otros tantos que lo habían ido deteriorando, y que acabaron por hacer imposible su restauración. Sin embargo, esta nueva talla no consigue calar entre los hermanos y pasa a ser utilizada únicamente en años de lluvia inminente con la idea de no deteriorar más al antiguo. Su paradero es incierto pese a pertenecer a la Hermandad hasta su desaparición en 1961. En 1962 se decide encargar un tercer Cristo a Manuel Pineda Calderón que, con el paso del tiempo, sí logra ser el justo sucesor de la primitiva talla, que seguía presidiendo el Altar Mayor de la Capilla. No obstante, en un Cabildo celebrado en septiembre de 1989 se aprueba la restauración del «Cristo Viejo» a manos del profesor Francisco Arquillo, quien a lo largo de 120 días interviene al Señor abriéndolo, vaciándolo, limpiándolo y confeccionando una caja interior nueva procedente de un arca del siglo XVIII. De esta manera, nuestro histórico Titular vuelve a procesionar en 1990 después de casi 30 años sin hacerlo.

Al margen de esta restauración, el Cristo de la Vera+Cruz sufrió otras como las realizadas por Pineda Calderón en los años 1945 y 1950, y por Juan Abascal en 1977 – bajo la dirección de José Hernández Díaz – y en 1982. En 2014 volvió a ser intervenido por Marcos Moreno Acosta y María Jesús Pérez Rivera, coordinados y dirigidos por el propio Arquillo.

El Señor es conocido con otros apelativos relacionados con tradiciones populares. Una de esas denominaciones es “Cristo de las Aguas” debido a que en tiempos de sequía se recurría a Él en demanda de lluvias, como en el año 1882. También es llamado “Cristo del Lagar” o “Cristo de las Viñas”. El origen de este nombre se encuentra en unas pinturas al fresco que adornaban el muro donde se encontraba el viejo retablo de la Capilla, y que representaban a Cristo crucificado con dos ángeles adosados a la cruz que exprimían racimos de uvas mientras otros dos, que llevaban bandejas, recogían el mosto. Estas pinturas fueron tapadas a finales del siglo XIX y ‘descubiertas’ durante las obras de restauración de los año 1911 y 1912. Por último, otra denominación que ha llegado hasta nuestros días es la de “Cristo de San Sebastián” y su variante “Cristo del barrio de San Sebastián”, en referencia al lugar en que se venera: la Capilla (o Ermita) de San Sebastián Mártir.

CULTOS EN SU HONOR

Según consta en las Reglas, esta Antigua Hermandad celebra Solemne Quinario y Función Principal de Instituto para mayor Honor y Gloria de su Amado Titular. Estos Cultos tienen lugar durante la segunda semana de Cuaresma en nuestra Capilla de San Sebastián. Además, cada Viernes de Dolores tiene lugar el Devoto Besapiés y posterior Vía+Crucis por las calles de la feligresía, procediendo a la subida del Señor a su Paso Procesional a su finalización.

También en el mes de septiembre se celebra en la festividad de la Exaltación de la Santa Cruz, primitiva fiesta principal de la Hermandad, Triduo y Función en honor del Árbol Sacro Santo desde donde nos vino la salvación y se nos dio por Madre a María Santísima.

ESTACIÓN DE PENITENCIA

El Santo Cristo de la Vera+Cruz realiza su Estación de Penitencia en la anochecida del Jueves Santo sobre un paso de madera de caoba de estilo Barroco, realizado por Manuel Cerquera en el año 1952. La canastilla presenta en sus esquinas atributos de la pasión: en la delantera se observa la Santa Faz, en la trasera al Buen Pastor, y en los laterales las escenas de la Piedad y de la primera caída. Por su parte, en los respiraderos se encuentran el antiguo escudo de la Hermandad en la delantera y el antiguo escudo de Dos Hermanas en la trasera; en los laterales, el gallo y el cáliz. En las esquinas se sitúan las cabezas de los Evangelistas pintadas sobre pan de oro.

El paso fue restaurado por Manuel Pineda Calderón en 1967. En 1985 se volvió a restaurar en los talleres de Bejarano, añadiéndose un destacado moldurón en la parte superior de los respiraderos que realza el conjunto. Alumbran la divina presencia del Señor cuatro faroles del mismo estilo que el canasto del paso, con forma hexagonal y con un hachón de cera verde en su interior. Los faldones son de color negro.